He intentado que este punto y el siguiente ('Tharbad Intro') sean lo más fieles posible a lo que se narra en los módulos de Joc, 'Los ladrones de Tharbad' y 'El reino perdido de Cardolan', salvo ciertos matices y detalles.
Cuando los hermanos Albos, Marcho y Blancho, fundaron La Comarca, allá por el 1601 TE, el reino de Cardolan (S. 'Tierra de las colinas rojas'), era sólo un mero nombre en los antiguos mapas. Esta es su historia, la de los príncipes dúnedain que vivieron en este tumultuoso reino.
Cardolan se compone de las tierras que se encuentran
entre los dos grandes ríos de Eriador, el Baranduin
y el Gwathló-Mitheithel, y de aquellas que se
extienden entre la gran planicie de En Enedoriath. La frontera norte tradicional
era la Men Rhúen o camino del Este.
Aunque la temperatura es agradable sólo una pequeña porción
de las tierras son especialmente fértiles. Y su prosperidad se
basaba en el Gwathló (S. 'Camino Fluvial'), que permitía
una fácil vía de comunicación entre Eriador y el
resto de Tierra Media.
Cardolan se encuentra en el noroeste de Tierra Media, entre Arthedain,
Rhudaur, Dunland y las regiones más
al sur de Eriador. El centro de esta vía de comunicaciones
es la gran ciudad de Tharbad, autoproclamada Reina del
Norte. Las vías de comunciación, Men Carn (O. 'Camino Rojo') e
Ianur Men Formen (O. 'Viejo camino del norte'), que unen Tharbad con Arthedain
dividen de forma clara a Cardolan en dos distritos geográficos: Minhiriath
(O. 'La tierra de los arroyos') al sudoeste y Mintyrnath
(O. 'La tierra de los túmulos') al nordeste. Pero ambas zonas son desoladas.
Así mismo, se encuentra dividido en principados. A saber:
Reino de Saralainn (D. ‘Tierra eminente’), el Hírdyr
(O. ‘las Tierras del Señorío’) de Girithlin y Tyrn
Gorthad, el dominio del Señor de la Guerra, las tierras de Irnil
(O. ‘príncipe’) de Tinarë y Calantir
y los Cantones de Feotar. Además de los beffraen
de Rast Vorn y los eriadorianos de Pinnath Ceren
(las montañas rojas que dan nombre a Cardolan) que prestan poca atención
a sus señores. En teoría Gondor administra Tharbad hasta
que se restaure el reino dúnedain; en la práctica la ciudad es ingobernable,
ya que si lo fuera Gondor regiría sobre todo Cardolan.
Los príncipes de Cardolan siempre están en guerra contra alguno de sus
vecinos. Son como ciudades estado que luchan por dominar todo Cardolan,
por ello la ingente necesidad de mercenarios. Esa es principalmente la
razón por la que ninguno acaba de hacerse el más fuerte: están demasiado
debilitados. Constantes intrigas políticas, exploración y saqueo de muchas
ruinas cercanas. Incluso hay individuos que conquistaron un reino solos.
Además de que el Rey Brujo mantiene en Cardolan a muchos espías.
Para más información en cualquiera de los puntos consúltese el módulo
de Joc 'El Reino perdido de Cardolan'.
Hace muchos años Cardolan se encontraba cubierto por un gran bosque que cubría todo el sur de Eriador, de lo que sólo quedan los sibilinos bosques de Eryn Vorn (O. 'Bosque Oscuro') y Taur Iaur (O. 'Bosque Viejo'). Donde se supone que moran Tom Bombadil y Baya de Oro.
Vías fluviales: el Mitheithel es difícilmente navegable desde Tharbad hasta el ángulo, pero imposible de vadear en lo restante de su recorrido. Las tierras altas de Girithlin se elevan al este sobre la cuenca de Tharbad e incluyen una cordillera llamada Pinnath Nimren (S. ‘Cordillera Blanca’), llamada así por la blancura del mármol de sus piedras. La ruta por mar a Tharbad es más rápida que la terrestre. La costa norte de Cardolan es generalmente rocosa. Las costas de Eryn Vorn son las más traicioneras (bajíos y escolleras que suelen estar escondidas tras grandes bancos de niebla; muy pocas zonas donde poder amarrar), la costa sureste se encuentra jalonada por extensiones de pantanos en los q ue habitan extrañas criaturas.
Los nativos beffraen suelen atacar. Las costas de Saralainn disfrutan
de grandes playas de arena. En las tierras de Enedhwaith, estepas de hierba
son el hogar de tribus dunlendinas, que atacan Cardolan con frecuencia.
Al sur de Tharbad se encuentran los grandes bosques de los que se extrae
la mayor parte de la madera que se utiliza en los astilleros de Cardolan.
Expediciones casi militares de protección.
Las tierras de Enedwaith están constituidas por estepas de hierba que
son el hogar de muchas tribus dunlendinas, y los sibilinos Pantanos
de los Cisnes (S. 'Nîn-in-Eilph'), en los aledaños de Tharbad,
son famosos por los preciosos cisnes de las marismas que moran en ellos
y por la cantidad de hierbas que pueden conseguirse si se es habilidoso.
Dentro de sus fronteras se dan cita la más diversa colección de razas
nunca antes encontradas en Tierra Media, incluso de más allá de Rhûn
y Harad, por los enanos y por los hombres del norte de
Rhovanion. La mayoría son dunlendinos, eriadorianos y
dúnedain menores de la pequeña nobleza que emulan el estilo de vida de
Númenor. Las villas suelen estar construidas en mármol o alabastro y situadas
sobre las colinas. Eriadorianos son los hombres del río Baranduin (que
viven en pequeñas aldeas a lo largo del río y de la costa), los barqueros
de Tharbad y los que viven en
Pinnath Ceren (que visten con pieles de oso). También hay algunos esclavos
en la sociedad. Clanes Saralainn. Los curanderos Saralainn tienen gran
pericia. Gente común, hombres de norte, hobbits (muchos de los que habitan
en Tharbad son fuertes que sirven como guías en las marismas o trabajando
de herreros con los pocos enanos que quedan), los beffraen (los primeros
habitantes de Cardolan y que atacan a todos los extranjeros con los que
se topan) y, finalmente, elfos errantes (no es raro encontrar noldor por
las tierras de Myntyrnath en compañías errantes. Si no desean ser vistos,
la única señal de sus andanzas será el eco de sus lejanas canciones.
Los dúnedain no son demasiado devotos, aunque veneran a Eru a través de los valar. Culto no demasiado férreo a Tulkas y a Nessa. La gente común adora al padre cielo (Manwë) y a la madre tierra (Varda). Al haber llegado en los años de la plaga un gran número de hombres del sur, han empezado a surgir ciertos ritos sibilinos y tras ellos hay una religión negra.
En Tharbad hay una catedral a Eru y una colegiata a Tulkas (paladines de Tulkas) y Nessa (señora de las fiestas de Tharbad; muy querida y honrada, por lo pacífico y lúdico de su mensaje), así como algunos templos a Ulmo (que es de buen augurio para los marineros, gente muy supersticiosa). Y por supuesto, las curanderas de Estë.
Los paladines de Tulkas son conocidos en toda la Tierra Media por ser los mejores luchadores sin armas. Esa era la filosofía de Tulkas, y la han hecho propia. Un verdadero guerrero no necesita armas para postrar a sus enemigos. Esa noble actitud y férrea disciplina les ha hecho tener muchas bajas. Hace años se promulgó una ley que si se llegaba a cierto rango en el escalafón se podría tener acceso a armas. Para que al menos los líderes estuvieran más protegidos. La verdad es que Tharbad era bastante pagana hasta la llegada de la Inquisición. Que no hace otra cosa que recordar a los dúnedain lo que pasó con Númenor. Por su desidia, su orgullo y por menospreciar a Eru su castigo fue ejemplar. Y la Inquisición, encarnada en Adamekrot desea que eso no vuelva a suceder.
Los príncipes honran al comandante de las tropas de Gondor y recogen
los impuestos desde Tharbad.
Príncipe de Girithlin. Este baronazgo engloba la parte
nordeste de Minhiriath. Es regido desde Balost
(S. ‘el fuerte poderoso’), una fortaleza en las tierras altas del sur.
El Hildor del Príncipe Gorthad. La corte se encuentra
en la fortaleza de Minas Malloth. Significado religioso
de las tierras (tumularios).
Príncipe de Dol tinare. El príncipe ha adquirido la mayor
parte de las tierras del rey en la parte norte de la cuenca de Tharbad.
Dejaron hace tiempo por imposible a los eriadorianos de las Pinnath Ceren.
Incluye la bulliciosa ciudad de Metraith (Thalion), que
sirve ahora como capital. Han tenido que subsistir con el peaje cobrado
al tráfico que discurría por el camino norte.
Príncipe de Dol Calantir. El reino agrícola más rico
de Cardolan. El príncipe siempre ha regido sus tierras desde la magnífica
Argond (S. ‘piedra regente’), una torre situada a 30
km al suroeste de Tharbad.
Los Cantones libres de Feotar. Después de una época de
confusión el pueblo decidió gobernarse a sí mismo. Los ricos agricultores
y los hombres del norte casi gobiernan como una pequeña nobleza.
El reino de Saralainn. El rey de Saralainn reclama todas
las tierras de Minhiriath, pero actualmente solo domina
la región de Saralainn. La capital es Súduri. Los clanes
y las tribus deben servicios militares y tributos al rey, algo muy difícil
de obtener. Si todas las tribus y los clanes se recompusieran el rey de
Saralainn sería el señor más poderoso, pero todavía queda tiempo para
que esto ocurra.
Para más información sobre los príncipes de Cardolan ir a Príncipes de Cardolan.